¿Qué sucede con los gatos y las mujeres embarazadas?
Seguro que habéis oído hablar sobre lo que sucede cuando están cerca los gatos y mujeres embarazadas. No es recomendable que las mujeres embarazadas convivan con gatos o bien, al menos, que deben extremar las cautelas si tienen a un felino como mascota. La culpa de ello, la tiene un parásito llamado toxoplasma gondii, que habita en la carnes poco hechas, en frutas y verduras sin lavar, en el polvo, en la tierra, etcétera La cuestión es que los gatos pueden ser portadores de este parásito sin desarrollar ningún género de afección, con lo cuál es muy difícil de advertir si el animal está o bien no inficionado. Si el animal está inficionado, el parásito pasa a sus heces.
Los gatos y mujeres embarazas se darán cariño mutuamente, pero hay que tener cuidado porque existen varios inconvenientes.
Si la sangre de la madre se inficiona con el toxoplasma gondii, puede transmitirse a través de la placenta al bebé y esto les puede provocar pérdida de la audición, retraso mental y ceguera. Ciertos niños pueden desarrollar inconvenientes en el cerebro o bien en la vista años después del nacimiento.
Como hemos dicho el toxoplasma grondii puede morar en muchos lugares. Así que posiblemente cualquier persona haya sido inficionada y tenga anticuerpos. Solo un diez por ciento de las personas parasitadas presentan síntomas perceptibles, así que es usual haber pasado la enfermedad sin saberlo. Si tienes gatos como animales de compañía y te has quedado embarazada sería recomendable hacerte un análisis para determinar si tienes o bien no anticuerpos del toxoplasma grondii. Si no, no hay que preocuparse, sencillamente continuar una serie de reglas de higiene y alimentación:
- Que sea otra persona la que limpie el arenero del gato, a ser posible a diario. Sino más bien la mujer embarazada deberá limpiarla con guantes y lavarse las manos con jabón y agua tibia de manera inmediata.
- Usa guantes si harás tareas de jardinería.
- Alimenta a tu gato con pienso o bien comida de lata, jamás con carne cruda.
- Trata que el gato no salga de casa para no exponerse al parásito.
- Lávate las manos esmeradamente ya antes de comer y después de tomar contacto con carne cruda.
- Evita frotarte los ojos o bien la faz al preparar comida y limpia la superficie donde trabajaste.
- Evita comer carne o bien ave cruda o bien poco cocinada y frutas o bien vegetales sin lavar, huevos, leche sin pasterizar y jamón serrano.
